Arte de la transformación

Con el inconfundible sello del estudio CosasMínimas, este Salón de UsosMúltiples pensado para albergar reuniones puede convertirse en viviendacuando sea necesario.

Arquitectura 06 de enero de 2014 Espacio&Confort

Del mismo modo que el tímido fotógrafo cuyo nombre real es Peter Parker se transforma en el Hombre Araña para dar respuesta a una demanda social (en su caso de justicia), el SUM que aquí vemos (que expande las funciones de lo que años atrás denominábamos quincho) ostenta la novedosa cualidad de convertirse en casa si sus alegres y sociabilísimos dueños así lo quieren.
Su moderna fachada de líneas rectas conjuga el hormigón con grandes paneles de vidrio. La forma es tan sencilla como elegante y hace sistema con los materiales escogidos: es una T horizontal desde cuyo acceso puede apreciarse el verde del predio, un espacio transparente y fluido enriquecido por zonas a doble altura.
Según lo acordado entre los propietarios y los arquitectos, la planta baja cuenta con una cocina comedor bien amplia pues allí se llevan a cabo las mentadas reuniones; un estar apropiado para pasar momentos tranquilos o ver una película, por lo que se lo equipó con una pantalla de cine; y una dilatada galería con pérgola y un hogar exterior que al tiempo que extienden los metros cubiertos del área social, permiten disfrutar del parque proyectado en los dos terrenos linderos. A estas dependencias se añaden, como es usual, toillete, lavadero y cochera.{gallery row=1 col=1 width=225 height=225}/mdq_revista71/arquitectura/cosas-minimas/ext
La planta alta se reparte entre una sala de juegos para chicos (ubicada en el entrepiso, a doble altura) con televisor, Play Station, ping pong y otros instrumentos de recreación, una sala de juegos de mesa para los adultos que, por su disposición, goza de una sutil privacidad, dormitorio para huéspedes y baño.
Pese a la transparencia y la fluidez que caracterizan la construcción, el espacio prácticamente indiviso en la planta baja (sólo un tabique de piedra separa la cocina comedor del estar) ha sido sectorizado mediante las alturas y acertadísimas elecciones decorativas. Hay que destacar que los arquitectos pusieron especial atención al hecho de que en ese espacio único y a la vez múltiple iban a desarrollarse simultáneamente diferentes actividades, y que cada uno de los sectores debía ser capaz de brindar, durante las reuniones, diferentes climas. De este modo, decisiones estructurales y estéticas mediante, lograron que la tranquilidad del estar, la animación de la cocina-comedor y el inevitable bullicio de sala de juegos para niños convivieran sin estorbarse para que cada huésped pudiera sentirse a gusto en el lugar de su preferencia: afuera, adentro, en la planta alta o donde sea.


Por otra parte, los aciertos decorativos mencionados irradian su cabalidad en el marco de texturas simples, paredes revestidas en colores neutros, piedra y pisos agrisados que componen esa gran caja que atesora buen gusto.
En líneas generales, en la planta baja el estilo moderno da el tono, pero en cada sector es combinado con elementos pertenecientes a otra estética que guarda relación con la función a la que el sector está destinado. Por ejemplo, la larga barra de la cocina está circundada por unas banquetas con asiento de acrílico y pie de metal; la mesa de madera es de aspecto rústico pero las sillas replican la famosa “Chaise daw”, moderna por antonomasia; el aluminio de la parrilla brilla en la pared de piedra natural y así podríamos seguir por párrafos y párrafos sólo con la cocina, porque todo en la casa/SUM parece dispuesto para honrar la frase que enseña que “Dios está en los detalles”. En el estar, a lo moderno y a lo rústico, se añaden los sillones de estilo; el baño es una alucinación retro, la sala de juegos para chicos utiliza, sin abusar, colores eléctricos apropiados a la energía de la edad; y la de adultos armoniza con maestría el estilo inglés que Hepplewhite convirtió en el SXVIII en sinónimo de perfección y elegancia con el cuero de vaca y el cuadro pop. Un espacio múltiple e indiviso, transformable y a la vez único, como una obra de arte.


Texto: María Soledad Franco
Fotos: Leandro Arévalo


[ PROYECTO Y DIRECCIÓN]
cosasminimas Arquitectura - Diseño Interior
Arqs. Diego Ameal - Mariana Gizzi
Tel: (02229) 45 5662
E-mail: [email protected]
Web: www.cosasminimas.com.ar


[ INFORMACIÓN]
Tipo de proyecto: SUM (Salón de Usos Múltiples)
Ubicación: Hudson
Sup. terreno: 830 m²
Sup Cubierta: 360 m² - Sup. semicub: 15 m²
Finalización de obra: 2013


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