Divertirse, animarse, jugar con el doble sentido, hacer explicito lo sobreentendido. Decir lo que nadie dice. Ése es el concepto de este diseño pensado para resolver un problema femenino: el guardado de toallitas y tampones. Resuelto en manera sugerente y sencilla, contiene sin cerrar y permite acceder fácilmente al interior de manera también más que sugestiva. La sujeción a la pared está resuelta de manera muy sencilla: con dos sopapas considerando las superficies azulejadas del baño.
El nombre comercial es Chuchita Pérez Duval, protectora de protectores, un doble apellido, de buena familia. Viene presentada en una carterita al mejor estilo “Luis Buitton”, otorgando dignidad y elegancia al diseño y completando “con ironía” el concepto de jugar en el límite sin ser vulgares.~
Ominim, 49 e/9 y 10