Ingenio práctico

Un recorrido atento por esta acogedora vivienda, un intercambio de ideas, un análisis de su obra, nos da cabal conciencia de su interesante construcción, amigable con la naturaleza.
Una vivienda, donde se combina diseño y practicidad, actuando como bálsamo cotidiano del cansancio de sus moradores, con un costo de ejecución razonable y que ofrece disfrute con el menor esfuerzo posible y, siempre, con la naturaleza como impecable telón de fondo.
Su arquitectura, de mínimos recursos, tanto materiales como formales, no sólo es como elección estética sino, también, como principio ético de valoración de un uso más racional de los variados recursos disponibles.
Un proyecto, donde se propuso un audaz uso de la chapa como elemento estructural tanto para los muros exteriores como para la cubierta. Esta última, un plano inclinado, de una sola pendiente, que se prolonga en el contrafrente, conquistando un envidiable espacio exterior.

A pesar de que utilizar chapa como material constructivo respondió a un impulso, luego de hacer un arduo trabajo de investigación, el profesional responsable de esta obra, descubrió que este  tipo de construcción esta marcando una fuerte tendencia en Europa y en los Estados Unidos.
La calidad expresiva de la chapa metálica y sus propiedades de resistencia e impermeabilidad, sumado a una eficiente ejecución de aislación térmica, hacen innecesario cualquier tipo de acabado superficial exterior, logrando un bajo costo de construcción sin mantenimiento a futuro.
Por otro lado, el color y brillo de la chapa, resulta de una presencia tan contundente y mimética a la vez, que permite que la obra se exprese en entera armonía con el paisaje circundante.
Las fachadas de esta vivienda, son una envolvente de tres únicos materiales en perfecto equilibrio formal y visual: metal, madera y vidrio, que resuelven la integración armónica con su entorno natural y da respuesta a los temas formales, estructurales, funcionales, de terminaciones y de mantenimiento. Sin olvidar, seguridad y absoluto confort interior durante todo el año.

Disfrutar del aire y la naturaleza, es fundamental en las épocas estivales. Por eso, se prolongó la plataforma sobre la cual esta casa se erige y que la eleva por encima de la cota natural del lote, convirtiéndola en un extenso deck de madera. Un plano horizontal que otorga un toque de calidez al parque trasero, permitiendo, de esta manera, el desarrollo de diferentes actividades al aire libre.
En el exterior, una colorida caja paisajística, se crearon varios rincones para que los miembros de la familia tuvieran su espacio propio: tanto de tranquilidad como de reunión.
La piscina, rodeada de exuberante verde, tiene un sistema de rebalse que permite renovar el agua para que se mantenga fresca, aún en días de mucho calor.
Una tentadora plaza de agua, ideal para dar largas brazadas bajo un cielo estrellado o simplemente, un ocasional chapuzón revitalizante.
Otro espacio posible de reunión o para la silenciosa contemplación del paisaje natural, se configura con un pintoresco banco de plaza y una rústica mesita baja.
Una casa, pensada y construida para que el confort de la vida cotidiana sea sin prisa ni presiones, donde situaciones y momentos se sucedan bajo un techo protector, al reparo de infranqueables y especulares muros que dejan lejos las inclemencias del afuera.

Texto: Dis. Int. Ana Thorschmidt
Fotos: Leandro Arévalo