Del 4 de octubre al 10 de noviembre se llevará a cabo la exposición de arquitectura, diseño y paisajismo en el Banco Tornquist. Una selección con las últimas tendencias e innovaciones, con el arte y lo sustentable como premisas que se imponen en cada espacio.
Casa FOA, la exposición nacional de arquitectura, industria, diseño interior y paisajismo, fue creada por iniciativa de Mercedes Malbrán de Campos en el año 1985, con el objetivo de recaudar fondos para la Fundación Oftalmológica Argentina Jorge Malbrán.
De esta manera, se ha constituido como un espacio para el libre desarrollo de la creatividad en donde diseñadores, arquitectos, decoradores y paisajistas comparten sus búsquedas y hallazgos. Desde hace 30 ediciones, pone en escena edificios históricos, rincones de la ciudad y diversas nuevas formas de habitar, intentando, año a año, lograr una simbiosis de la sede y la exposición. Un camino trazado entre sedes patrimoniales, vanguardia y revalorización urbana.
El edificio del Banco Tornquist, ubicado en la calle Bartolomé Mitre 559/31, en pleno microcentro porteño, es el escenario elegido para esta nueva edición de Casa Foa 30 Casas. Se trata de un lugar con la historia y el sello del arquitecto Alejandro Bustillo declarado Patrimonio Histórico de la Ciudad de Buenos Aires. Construido en 1926, este edificio de estilo neoclásico fue siempre un espacio deseado por la organización de Casa FOA, no sólo por su riqueza histórica, sino también por el valor agregado que le da la firma de Bustillo en su arquitectura.
Casa FOA/30 Casas cuenta con más de treinta espacios de arquitectura e interiorismo. Este año, uno de los ejes principales en los espacios fue avanzar en la incorporación del concepto de sustentabilidad, promoviendo la evolución y el desarrollo de la industria, de la mano de iniciativas orientadas a la preservación de los recursos naturales. Por su parte, el arte es otro de los ejes de intervención presente en la exposición, con instalaciones artísticas de ambientadores, vidrieras de tendencias para lucir objetos de diseño y variados talleres de oficios para exponer artesanías.
La muestra se desarrolla en 4000 m², correspondientes a la planta baja y al primer piso del edificio. 30 espacios de arquitectura e interiorismo que reúnen las últimas tendencias de diseño, arquitectura y paisajismo, donde se demuestra la frescura y la creatividad como el que aportan las becas de arquitectura (con su temática home office de un diseñador), en su cuarta edición y con récord de participantes, y la beca de paisajismo, convocada por primera vez este año. Los bancos urbanos vuelven a ser protagonistas del Concurso de diseño, por cuarto año consecutivo, los cuales se encontrarán ubicados a lo largo del recorrido de Casa Foa. Y por segundo año cuentan con la presencia de universidades y locales de venta de objetos originales y creativos. Además, como novedad de esta edición, se lanzó la revista de CASA FOA.
Este año se cumplen 30 casas (29 años) desde su nacimiento. La característica diferencial de esta edición es la fuerte y continua presencia de dos conceptos que mencionamos: el arte y la sustentabilidad.
Un espacio emblemático del diseño que congrega propuestas vanguardistas de las más variadas tendencias. El momento y el lugar para crear, renovar, construir y plasmar ideas en un juego abierto a todos.
La historia, la localización oportuna, la belleza arquitectónica, los nuevos lenguajes del diseño y la creatividad. Todo se conjuga en Casa FOA.•
BECA ARQUITECTURA 2013. ESTUDIO G7
Home office: el objetivo fue crear un espacio flexible y sustentable en un ambiente moderno que representara las nuevas formas en que se desarrolla el trabajo hoy en día. Guiados por el espíritu sustentable, se decidieron por un único elemento material utilizado de distinto modo, que corporiza las áreas de trabajo y de esparcimiento: el palet.•
BECA PAISAJISMO. ESTUDIO ZODA
La propuesta de este espacio fue cuidar los ecosistemas y proponer nuevas interacciones entre sujeto, objeto y entorno. “Diseñamos un objeto que fuera capaz de albergar todas esas imágenes preexistentes, adicionando cierta flexibilidad y sensualidad a la rigidez del contexto. Decidimos que tuviera una forma reconocible, simulando una maceta a modo de topiario, pero construida a partir de una estructura liviana revestida de superficies circulares espejadas”, explican las diseñadoras.•
Fotos: Leandro Arévalo